5/2/11

¡A prohibir los videojuegos!

Ayer, navegando por internet (uno de esos pequeños placeres que ofrece la vida) me encontré con este titular en el periódico Público:

UN NIÑO CAE A LAS VÍAS DEL METRO EN MILÁN, DISTRAÍDO POR LOS VIDEOJUEGOS

Típico ejemplo de titular amarillista que busca la confrontación entre los que culpan a los videojuegos de los crímenes salvajes (recordemos el asesino de la Katana) y los que, con razón, alegan que los que matan son las personas, no los videojuegos (Jack el Destripador no jugaba al GTA, señores). Pero, naaaada, los videojuegos son malos, fomentan la violencia, nos vuelven medio gilipollas… Nada, nada, los prohibimos y ya está, no vayamos a alterar nuestro estado de bienestar.

Lo gracioso viene en el subtitular de la noticia:

El menor, de 10 años, fue rescatado por un policía que saltó a rescatarle. Ambos se encuentran en perfecto estado.

Es decir, que la noticia es una soberana chorrada. Un niño cae a las vías del metro (distraído, en este caso, por su PSP, pero bien podría estar distraído con un cartel, escuchando música, leyendo un libro (¡quememos los libros!) o, si fuera un poco más mayor, con alguna rubia despampanante (¡quememos a las rubias!).

0 comentarios:

Publicar un comentario