¿Sabéis ese chiste malo en el que un tío tapa a su ordenador con un plástico para evitar que le entren virus? Pues esto es igual pero cambiando las tornas. Mark Gasson, un científico de la Universidad de Reading, haría bien en pasarse el Norton de vez en cuando.
Mark Gasson tiene un chip implantado en su mano para identificarse en puertas de acceso restringidas o bien desbloquear su teléfono móvil. Probando la fiabilidad del aparato, el doctor Gasson ha conseguido transmitir, a partir de su chip, virus informáticos a sistemas de control externos.
Así, el doctor Gasson ha lanzado un claro mensaje. La mejora de la tecnología en el ámbito de la salud también tendrá riesgos.
Los beneficios en este tipo de tecnología también conllevan sus riesgos. Podemos mejorar, pero estas mejoras, como en el caso de los teléfonos móviles, pueden volverse vulnerables a riesgos, tales como problemas de seguridad y virus informáticos.
Que sí, puede parecer algo trivial, pero cuando hablamos de marcapasos, la cosa se pone más seria.
0 comentarios:
Publicar un comentario