Tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe o la codicia rompe el saco son dos refranes ciertos como la vida misma, y que bien podríamos aplicar a la noticia que leo en ElMundo respecto a la SGAE y el canon digital.
La historia se remonta a unos años atras. La SGAE (Sociedad General de Autores y Editores, como todos sabemos), interpuso una demanda a la empresa Padawan SL, que vende CDs, CD-RWs, DVDs y Reproductores MP3 reclamándole que le pagara por el canon digital correspondiente a la venta de esos dispositivos entre septiembre de 2002 y septiembre de 2004.
Pero la SGAE cometió un error al emprenderla contra una empresa aprendiz de jedi, ya que esta alegó que la aplicación del canon indiscriminadamente y sin distinguir la finalidad a la que van destinados violaba una directiva europea. Es decir, que Padawan SL dijo algo como: ¿por qué tengo que pagar canon digital para compensar a unos autores si en esos dispositivos puedo grabar documentos personales, de mi trabajo, sin derechos de autor?
A los juzgados les dio igual y condenaron a Padawan SL (no me cansaré de escribir el nombre de la empresa) el montante de 16.759,25 euros, lo cual es un pico. Sin embargo, Padawan SL recurrió la sentencia a la Audiencia Provincial de Barcelona, y de ahí ha pasado al Tribunal europeo de Luxemburgo para ver si esto de aplicar canon a doquier, pagando a unas personas por algo que no sabemos a priori si les perjudicará, es legal o no.
Imagen | PCTrucos
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