Los científicos no arrojan la toalla y siguen tratando de encontrar vida en nuestro vecino, el planeta rojo. Y ahora las opciones pasan por encontrar las fuentes que original que haya gas metano en su atmósfera, el primer componente orgánico que se encontró en Marte.
Gracias a las observaciones desde la Tierra, se han encontrado trazas de Metano en tres lugares diferenciados de Marte, y no por toda la atmósfera, lo que indica que tan rápido se crea como se destruye. Asimismo, hay una sensible variación de cantidad de gas metano dependiendo de la estación en la que nos encontremos, y sólo queda averiguar que lo produce.
En la Tierra, el gas metano proviene de dos fuentes: una es geológica, y la otra es biológica. La NASA y la ESA están buscando la fuente biológica, liberada por una bacteria llamada methanogens, y para ello, van a iniciar un proyecto conjunto entre las dos agencias en las que se planea mandar un satélite y un rover para el año 2016. Para el año 2020, por otra parte, está proyectada la primera misión de retorno del planeta rojo, con lo que los científicos tendrían sustancias de Marte para tratarlas en un laboratorio en vivo.
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