Mientras en España los partidos políticos con mayor representación (PSOE, PP y CiU) se ganaban el cielo de la industria audiovisual aprobando la famosa Ley Sinde, al otro lado del charco, el servicio brindado por Netflix demuestra que otro tipo de negocio es posible en el que todo el mundo gane.
Netflix surgió allá por el año 1997 como un videoclub online, en el cual los usuarios, a cambio de una tarifa mensual, tenían acceso a todo el catálogo de DVD’s de la compañía, recibiendo los ejemplares físicamente en el buzón. Sin embargo, el verdadero boom de este servició llegó cuando Reed Hastings y Marc Randolph, fundadores de la empresa, decidieron brindar vía streaming (es decir, verlo online sin descargar) todo su catálogo a cambio de una cuota mensual, si bien continúan facilitando la posibilidad del envío por correo.
Netflix lleva dos años cosechando éxitos, hasta tal punto que lidera el mercado en EEUU y Canadá con más de 20 millones de usuarios y 100.000 productos en el catálogo.
Para entendernos, Netflix ofrece un sistema como el de seriesyonkis pero de forma totalmente legalizada tal y como la entiendes las compañías de distribución, ya que, a día de hoy, una página como seriesyonkis es legal. Sin embargo, con Netflix todos ganan (usuarios, propietarios de la empresa y creadores). ¿Cuál ha sido el problema todo este tiempo para que Netflix no haya desembarcado en el mercado español? El coste de los derechos de autor, muy altos en España. De hecho, la Asociación de Internautas cree firmemente que si todos los esfuerzos que los diferentes Gobiernos españoles han gastado en obstaculizar las descargas (sin éxito) lo hubieran desempeñado en fomentar la creación de una alternativa, tendríamos un Netflix propio. Y la gente quiere un sistema de este tipo, y he ahí el ejemplo de Spotify para demostrarlo.
Si Netflix desembarcara en España, extrapolando el funcionamiento en América, el usuario tendría que pagar unos seis euros de cuota mensual a cambio de tener acceso a todo su contenido online (alta calidad, inmediatez, y nada de sorpresas) de una forma en la que la empresa tiene todas las licencias para emitir esos contenidos. Por 6 euros al mes, ¿alguien se dedicaría a buscar por internet?
Netflix genera en Estados Unidos el 20% del tráfico online.
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