Cuando escuches al religioso de turno decir que esta sociedad se va al infierno y que es cuestión de tiempo que llegue el apocalipsis más o menos como lo escribió San Juan, deberías decirle que no vaya tanto de listo y se acerce por Centralia, una ciudad de Pennsylvania (Estados Unidos) donde el fuego reina desde hace ya 47 años, desde 1962. ¿Cómo es posible?
En aquel año, alguien tuvo la ocurrencia un fuego en una zona del basurero de la ciudad donde había una mina abandonada, con tan mala suerte de que se encendió una vena expuesta de carbón y el fuego se extendió por todas las minas situadas debajo del pueblo. Se intentó detener el fuego, pero no hubo manera, y, a lo largo de las décadas de los 60 y los 70, muchas personas tuvieron problemas de salud debido a la inhalación de monóxido de carbono.
Visto que no había modo de solucionarlo y que vivir en ese pueblo, que contaba con unos 1.000 habitantes, era más peligroso que saltar desde la Torre Espacio de Madrid, el Gobierno yanqui decidió repartir 40 millones de dólares para la reubicación de los vecinos en pueblos cercanos, algunos de los cuales aceptaron resignados. Siempre quedará un porcentaje del típico "¡yo no me voy de mi pueblo!". En la actualidad creo que hay 9 habitantes, sin Servicio Postal ya que el Gobierno lo revocó.
Teóricamente, el fuego, que yace a 1600 metros de profundidad, seguirá ardiendo al menos 250 años más.
Y, de regalo, un dato curioso. La película 'Silent Hill', la adaptación de ese juego que siguió un tanto la estela de 'Resident Evil' y que acojonaba asustaba bastante, se valió de Centralia como inspiración.
Fuente | Wikipedia
0 comentarios:
Publicar un comentario