O robot japonés a lo Gisele Bundche, que sería lo más correcto. El caso es que los japoneses, que alumbran al mundo con sus inventos estrafalarios entre otros que hacen la vida realmente más fácil, han desarrollado este robot que promete ser la sensación en las futuras pasarelas de moda.
Bueno, realmente tendrán que serlo sus hermanas mayores, porque según los diseñadores, "es demasiado baja y ordinaria para ser modelo". ¡Pero como va a ser ordinario un robot! Además, saludó a todos los presentes con una sonrisa en la boca y un "Hi everyone!"
El robot en sí, llamado HRP-4C, pesa 43 kilogramos y mide 1.58 metros de altura, y si no puede ser usado como modelo, ya que por lo visto no sustenta la seguridad necesaria para trabajar codo con codo con las modelos reales (que me imagino yo a las pobres mirándola de reojo en plan: "te odio"), podrá trabajar como monitor de gimnasio. Que a mi me hace gracia eso de trabajar, porque realmente el robot no verá un euro, dólar o yen, pero tiempo al tiempo. La era de los replicantes está cada vez más cerca y dentro de poco no podremos saber quién es un robot y quien no.
Además, para 2050 ganarán la Copa del Mundo de fútbol.
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