Este domingo debería, si todo va bien, volver a la Tierra, sana y salva, la sonda japonesa Hayabusa, con restos de un asteroide, concretamente el 25143 Itokawa, al que llego hace ya cinco años. Si la misión consigue concluir con éxito, será la primera vez que muestras de un asteroide sean traídas a nuestro planeta.
Sí, puede que esto mole menos que una misión para recoger muestras de la Luna o estudiar los entresijos de la historia de Marte, pero los científicos coinciden en que el estudio detallado de un asteroide es muy importante, y he aquí cinco razones para probarlo.
1. Nos hablarán de los orígenes del Sistema Solar
El material de los asteroides representan los bloques de construcción de los planetas.
Son palabras de Carol Raymond, principal investigadora del programa Amanecer (Dawn) de la NASA, que despegó en 2007 y tiene pensado visitar el asteroide Vesta en 2011 y el planeta enano Ceres en 2015. Al estar el cinturón de asteroides colocado entre las órbitas de Marte y Júpiter, un estudio de estos asteroides podría descubrirnos el origen de la diferencia entre los planetas gigantes gaseosos y los rocosos.
2. Podría ayudarnos a entender el origen de la vida
Es un misterio, todavía, como pudo originarse la vida en nuestro planeta a partir de materia no orgánica. Hay dos asteroides, el 2 Pallas y el 10 Hygiea, que se piensa tuvieron agua en su pasado, y parece que tienen compuestos basados en carbono. Las condiciones de los asteroides son mucho más precarias y primitivas que las de nuestro planeta.
3. Podríamos explotarlos en busca de minerales
Los asteroides podrían ser una gran fuente de metales, si bien habría que estudiar la viabilidad enfocada en la cercanía de éstos a nuestro planeta y la de los viajes ida y vuelta a su superficie.
4. Un día de estos podría colisionar un asteroide contra la Tierra
Y ese día será muy, muy chungo. En enero, el asteroide 2010 AL30 pasó a tan sólo 130.000 kilómetros de la tierra (diez veces el diámetro de nuestro planeta, aproximadamente). Este asteroide tiene un tamaño de 11 metros, pero hay otros asteroides que son mucho más chungos, como el famoso Apophis, que podría colisionar contra nosotros el 13 de abril de 2036 (no, no cae en martes y trece, es domingo). Teóricamente, este asteroide pasará a, como mucho, 25.000 kilómetros y mide como dos campos de fútbol.
5. Los astronautas podrían visitar uno
En 2025, los astronautas podrían visitar un asteroide. Esto se desprende de las declaraciones que hizo Barack Obama, flagrante Premio Nobel de la Paz.
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