El que todo el mundo calificó como Partido del Milenio se lo acabó llevando el FC Barcelona que, hoy por hoy, es el mejor equipo de fútbol del mundo, como bien recalcaba su camiseta, con el emblema que les caracterizaba como ganadores del mundialito de clubes.
La cosa es que eso del Partido del Milenio no existió, porque el partido fue bastante soso. La primera parte más que la segunda, tenemos que decir. Las ocasiones no llegaban y los jugadores no parecían ponerle mucho empeño en cambiar las cosas. Hasta que apareció Lionel Messi, cómo no, regateó a Albiol con el pecho y con sutil toque batió a Iker Casillas, que no está viviendo sus mejores momentos, aunque en la segunda parte evitó un par de goles cantados. Igual que Víctor Valdés, que llama con fuerza a las puertas de la selección, algo de lo que Vicente del Bosque tomaría buena nota en el palco presidencial junto a su “buen amigo” Florentino Pérez, que tras gastarse 200 millones de euros, ve como su equipo, lógicamente, necesita todavía más tiempo para ajustarse. Y no necesariamente más refuerzos tipo Franck Ribery.
Comenzó la segunda mitad y por ahí apareció el omnipresente Pedro, un tío que debe llevar algo así como 500 goles en liga, porque siempre que aparece te hace un traje y te mete gol. Error garrafal de la defensa española en ese gol. Y como revulsivos, al ingeniero Pellegrini se le ocurrió meter a Guti, que desatascó un poco el juego y fue el causante de la mejora aislada del juego del Real Madrid, donde sólo un Cristiano Ronaldo cabreado e impotente parecía tener algo que jugarse. El portugués tiene que entender que el Real Madrid todavía no es un equipo, pero le queda el consuelo, si le vale, de que es el mejor de los tres que han llegado. Salió Raúl también, ovacionado por la afición, que le da igual lo que diga el As, el MARCA, el Mundo Deportivo o el Wall Street Journal. Raúl es el emblema del madridismo y eso lo sabe la afición. De hecho, el gran capitán metió un gol, anulado por culpa de una estúpida mano de Karim Benzema.
Ahora el FC Barcelona está 3 puntos por encima, que gracias al gol average particular, se convierte en 4. Y quedan 7 partidos para terminar la Liga.
Imagen | MARCA
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