Los acusados de maltrato perderán la custodia de sus hijos

Sí. Han leído bien. Los acusados de maltrato doméstico perderán la justicia de sus hijos. No los condenados. Los acusados. ¿Y esto qué significa? Pues que si eres hombre y tu pareja decide denunciarte por malos tratos, perderás ipso facto la custodia de tus retoños, y, después, procederá, cuando sea menester para la Justicia, el juicio, del que serás encontrado culpable… o inocente. ¿Y si resulta que eras inocente? Ah…

¿Y esto por qué es? Pues porque le da la gana a la ministro de Sanidad (sí, ministra está aceptado, pero como ella dice cónyugue en lugar de cónyuge, pues aquí que cada uno diga lo que quiera), ya que la retirada de la custodia para el maltratador (y suponemos que maltratadora, si se diera el caso, aunque, como comprenderán, es un poco poner la mano en el fuego) ya es efectiva en caso de que se prueben los maltratos. Ahora, no. Bajo la excusa de que, según Rubalcaba, prefieren ponerse del lado del presunto maltratado que del presunto maltratador, el acusado de maltrato perderá la custodia de los niños, si los hubiere. Teniendo en cuenta de que rara vez le pasa algo a una mujer cuya denuncia que ella misma ha interpuesto es falsa, parece claro que puede haber un tsunami de denuncias de malos tratos con claros objetivos retira-custodias.

Es una medida cautelar. Claro, que viendo cómo está la justicia, el hombre que haya sido acusado injustamente, a lo mejor sólo pierde 3 ó 4 años de ver crecer a sus hijos. Nótese la ironía. Y que conste que no me pongo del lado del maltratador, aunque seguramente haya quien lo crea firmemente, porque o se está a ciegas con las medidas o estás en contra, simplemente, creo que una Justicia que se precie tiene que empezar con la presunción de inocencia. Lamentablemente, mucha gente comienza a estar harta de estas medidas absurdas y quien más puede verse perjudicado son las propias mujeres que realmente sufren maltrato. Aunque tal vez todo valga para polarizar la sociedad.

Parece que de nada ha servido que unas cuantas asociaciones de jueces hayan salido a escena diciendo que esto es una cosa innecesaria, propagandística y peligrosa que puede provocar perjuicios irreparables.

Según el diario Público “nunca está de más estrechar el cerco a los maltratadores”. Espero que ese cerco no se estreche demasiado y ahogue a hombres inocentes que se vean envueltos en una espiral de incoherencias y presunciones de culpabilidad. Que, haberlos, haylos.