Ya lo decía el director de El Mundo, Pedro J. Ramírez. La SGAE es la sociedad que más méritos hace por caer mal a todos y cada uno de los ciudadanos españoles. Y es que desde hace cosa de dos años cada semana hay una noticia de esas que te enfurecen y rabiar como un perro. Eso sí, desde hace unos meses, la frecuencia de noticias ha aumentado hasta tener, mínimo, una al día.
La última, según he podido saber gracias a ALT1040, es que cinco personas, tres de ellas relacionadas con la entidad gestora de derecho, solicitaron, sin autorización (fuente: El Mundo) y con el argumento de tener una orden para hacerlo - que no existía - registrar la casa de un administrador de dos páginas web de enlaces P2P. El administrador les dejó pasar, craso error, pero entendible debido al estado de nervios que tienes que sufrir cuando cinco tíos llegan a tu casa y te dicen que tienen una orden judicial que les da derecho a revisar cuanto les venga en gana.
Revisaron el contenido de sus ordenadores y requisaron los discos duros. Mientras estos personajes estaban inspeccionando todo lo que creyeron conveniente, Juan José Coronel Carrasco, el afectado, de 26 años, llamó al abogado David Bravo, especialista en estos menesteres, para que le informara sobre qué pasos tomar a continuación. Tras escuchar de labios de Juan José el auto que traían los investigadores, el abogado le dijo que echara a los individuos inmediatamente de su casa y que no se llevaran los discos duros. Y es que incluso uno de ellos trató de entrar, sin éxito, en el ordenador del hermano pequeño de Juan José, que lo tenía protegido con contraseña, y pidieron a Juan José que contactara con su hermano para que se la dijera.
¿Cómo se les ocurre entrar en un domicilio privado a registrar sin ser agentes de la Policía? ¿Cómo se creen tener ese derecho? Por mucho contenido ilegal (que volvemos a la historia de siempre, sin ánimo de lucro no hay descargas ilegales) que se tenga, los que pueden hacer uso de una orden judicial son hombres de uniforme. Si no viene ningún policía, a mi casa no entra nadie. Pero claro, te cogen de buena mañana, te sueltan el rollo de la orden y lo primero que haces es asustarte. ¿Qué vas a hacer? Te han pillado en frío. Sólo espero que la denuncia que haya realizado Juan José les dé un buen varapalo. Todos somos Juan José. Igual que hoy le ha tocado a él, mañana nos puede tocar a nosotros.
Viniendo también un poco a cuento, el otro día vi una broma realizada por un programa de La Sexta en el cual un tío vestido con un chaleco reflectante (en los comentarios de apoyo a Juan José hay muchas referencias al mismo) se dedicaba a requisar los reproductores MP3 a la gente porque tenía un sensor que detectaba contenido pirata. Lo único claro que se podía sacar de ahí es que hay muchísima gente pésimamente informada sobre este tema y que se cree que llevar música bajada de internet (nada de música ilegal o copias ilegales) es delito. Y buenamente le daban el reproductor al falso lo que sea. Es decir, que mucha gente se cohibe ante un tío que dice que te requisa tu propiedad por decir que tienes música pirata (¡que no es piratería!). Hasta este punto llega la desinformación.
Por cierto, que se prepare la SGAE para una buena semana de nuevas críticas, ya que son muchos los medios que se van a hacer eco de semejante suceso. Aunque de otros tampoco esperamos gran cosa.
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